Inés, una buena amiga, me escribía esta mañana un mensaje bastante gráfico. No creo que haga falta traducirlo ni en cantidad ni en peso de lo que sería capaz de ingerir si tuviera la oportunidad, pero en este momento no puede. Se comprometió con Oswaldo para realizar una dieta muy severa porque de aquí a quince días, tienen previsto un viaje a Marte y el equipo que los contrató dijo que no podían pasar de 45,6 y 69,4 kg respectivamente.
¿De dónde salen esas cifras tan extrañas? Verás. La tripulación de la nave está compuesta por cuatro personas, dos monos, un jilguero y una nutria. Según me indicaron, a los animales no los tratarán como conejillos de indias, todo lo contrario. En esta ocasión todos son protagonistas del experimento.
El equipo humano va a ser el responsable del pilotaje de la nave, junto con el jilguero que ya participó en el vuelo del Columbia y del Space Blue, de Soros. Inés, comandante de vuelo de las líneas regulares de Air Nari kurya intare y Oswaldo, un añadido de última hora al proyecto Hércules, se ofrecieron voluntarios para realizar, junto a sus dos compañeros, dos enanos del circo Raluy, un vuelo en tiempo récord, con el objetivo de llegar a casa justo para el té de las cinco.
Para conseguir esta velocidad, ingenieros del equipo de Must y Soros, participaron en el montaje del motor de curvatura que está ensamblado en la nave Entreprisa.
El experimento prometía bastante. Era muy interesante, pero a última hora del miércoles decidieron, de forma unilateral, que prescindirían de la ingesta de hoy, cosa que ha sentado como una patada en el bajo vientre a más de uno; en especial a Inés, que lleva haciendo ayunos intermitentes desde hace varios días.
¿Por qué los promotores del viaje insisten tanto en el peso? Resulta que esta expedición está diseñada bajo la constante de Kaprekar. ¿Te dice algo el número mágico 6.174? Este señor fue el descubridor de la constante. Según él, no es un número cualquiera. Es el número. Seis mil ciento setenta y cuatro son los kilos que pesa el proyecto y también la velocidad a la que va a viajar el Hércules. Y no estamos hablando de kilómetros por hora, no. En esta ocasión se trata de viajar a 6.174 km por segundo. ¿No te parece alucinante?
Si sumas los kilos de cada uno de los componentes del equipo, ya sean humanos y animales, el resultado es 478,42 kg. Para llegar a la cifra mágica de 6.174 kg, da la casualidad que el material que se va a usar para la misión pesa 695,58 kg y la nave, cinco mil kilos. Suma todas esas cantidades. ¿Qué te sale? ¿A qué da un resultado bastante sorprendente?
Si estás interesado en saber más acerca de la constante, puedes echarle un vistazo a este link. Ahora te dejo porque he de preparar el neceser y la bolsa de la ropa sucia que, antes de usarla, ya hemos de saber exactamente cuánto pesará sucia.
Esto es un fliple…